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Quítate el sujetador...




Y no sólo me refiero a liberarte del brassiere de vez en cuando y dejar que tus pechos sean libres; gran metáfora de la opresión que hemos construido.


La opresión ha habitado nuestros cuerpos desde hace muchísimo tiempo, y la hemos interiorizado, reproducido y sostenido a niveles tales, que pensamos que la salud es la neurosis.

Cuando estudié psicología, era base del saber que la neurosis es lo "normal" porque es la norma, es lo que la mayoría vive y eso lo hace lo normal. Y años después gracias a muchos procesos, aprendizajes y a un año de acostarme en el diván y dejar fluir mi palabra; me he encontrado con que quisiera moverme ya más allá de la neurosis, me pregunté un día si hay un más allá de esto que he creído lo normal por tanto tiempo, este molde cuadradito en el que tiene que caber todo lo que soy. Y recuerdo cuando me crecieron los pechos así con todo, tenía 12 o 13 años y ya usaba copa B o C y siguieron creciendo claro, y para los 18 era un asunto encontrar un brassiere que me quedara; ahora lo entiendo no quepo en ningún molde.


Pero lo he intentado, hasta cansarme, encajar, pertenecer, seguir la corriente de lo que es "normal", pero normal es la neurosis, normal es la opresión, todo lo que nos sofoca se ha normalizado. Normal es que si vivimos en Latinoamerica estemos entre el 85% de mujeres que damos a luz por cesárea, o que pensemos que la maternidad y el éxito profesional son incompatibles, pero que a la vez la autoexigencia sea tal que si no se es madre se crea que no se es exitosa y viceversa o que el concepto de feminidad este ligado a lo que se ha estipulado como belleza, como sensualidad, y nada más pueda caber ahí.


Entonces todos esos aparentemente normales constructos sociales, no son más que cadenas que nos atan, nos mantienen sujetos. Nos ata la opinión de los demás, la necesidad de pertenecer y seguir un modelo aceptado. Y qué si mejor nos asumimos como verbos y no como sustantivos; corre, muévete, haz, siente, llora, ríe, canta, déjate llevar... Vive!!!


Y si sabes que hay cadenas que te sujetan demasiado, libérate de ellas, busca profundo qué caras tienen, a qué ideales, moldes, modelos, imágenes estás sujeta, y toma a conciencia la decisión de soltarte de dónde estás atada y no te permite ser verbo, elige de qué te agarras, y que sea tu sostén no tu cadena, que te de significado, no que te defina.

Porque puede ser que esas cadenas tengan forma de algún síntoma en tu cuerpo, o en tu mente y emociones; como los padecimientos del útero y ovarios, o de los senos, o del corazón que está tan cerquita de ellos, si pocas veces te has permitido ser libre, expresarte, ser completamente tu, entonces lo más probables es que estés sujeta a pesadas cadenas.


Te comparto el último podcasta que grabé, "cuando el útero llora" ahí hablo de todos esos componentes de la opresión y las cadenas que han tomado forma de quistes, miomas, irregularidades en el ciclo menstrual, infertilidad, perdidas gestacionales etc.


El foro abierto para recibir tus dudas y comentarios, gracias de antemano por leerme y escucharme.


Ana



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